GLADYS MARÍA PRATS
                                                                                 
                                                                                Gladys  Bisellach Carrillo de Vizcarra (*Catacaos, 10 de abril de 1928), destacada  poetisa y compositora peruana, cuya vena artística representa al amor.
                                                                                Es hija de  padre nacido en Mallorca, España: don Andrés Bisellach Figuerola y su madre  peruana doña Gerardina Carrillo Prado, nacida en el departamento de Piura, en  el norte del Perú. Desde muy niña ha demostrado su inclinación hacia el arte y  como ella más de una oportunidad ha hecho mención: Escribía palotes poéticos, y  esos mismos palotes poéticos se convirtieron tiempo después en sonetos, versos  libres, diferentes creaciones entre las que también destaca el hayku, poemas  que hicieron una amalgama de mensajes, amor, cuestionamiento, inquietud,  rebeldía por el mundo, y por la vida.
                                                                                La poesía de  Gladys María tiene y conserva dos parámetros fundamentales: Lo divino y el  hombre. Está casada con Godfrey Vizcarra Smith, con quien tiene dos hijas  Patricia y Catalina Vizcarra Bisellach.
                                                                                Casi  totalmente autodidacta, estudió arte escénico buscando caminos. Su quehacer  artístico de poesía, canciones y promoción cultural ha llegado a ser  reconocido. "Soy Mujer", con amor para todas las mujeres del mundo -  es su poema más leído, más buscado, más apreciado, es una manifestación íntegra  que no está en ninguno de sus libros, sí en antologías. Y el afamado vals  "Como una Rosa Roja", un clásico de la canción escuchado en  diferentes partes del mundo, cantado por la desaparecida cantante peruana Lucha  Reyes.   Fuente: wikipedia
                                                                                 
                                                                                TEXTOS  EN ESPAÑOL   -   TEXTOS EM PORTUGUÊS
                                                                                 
                                                                                
                                                                                ARIAS DE LA CANAL, Fredo.  El arquétipo fuego en la poesia de Gladys María Prats y Manuel Moreno  Jimeno.  Ciudad de México: Frente  de Afirmación Hispanista, A.C.,  2016.  124 p.   14,5x22 cm.  
                                                                                 
                                                                                
                                                                                  Este  fiero y vulgar informador
                                                                                    el  ético y formal razonador
                                                                                    el  indómito audaz impertinente
                                                                                    de  todo el universo y de la mente
                                                                                  el formador fantástico hacedor
                                                                                    el  pequeño rufián empreendedor
                                                                                    el  importante líder elocuente
                                                                                    el  efímero juez tan inclemente
                                                                                  anelante de amor y prisioneiro
                                                                                    entre  el coraje y el pensar extenso
                                                                                    de  mi pasión y de mi entendimento
                                                                                  y  ardiente entre la espada y el acero
                                                                                    y  tierno entre los ojos y el aliento
                                                                                    de  ese fuego indeleble tan intenso.
                                                                                
                                                                                 
                                                                                        ***
                                                                                
                                                                                  Cuando yo me desnuto en la palavra
                                                                                    y  acorto los umbrales     los abismos
                                                                                    cuando  siento el dolor como que estala
                                                                                    y al amor desmenuzo em su martirio
                                                                                  en  su placer la hoguera arde de sueños
                                                                                    y  palpitan los tempos y las almas
                                                                                    palpita  el universo y se sonroja
                                                                                    la  luz de la alborada
                                                                                  si me desnudo en órbita de luces
                                                                                    y  vuelvo hembra a la tierra
                                                                                    entrega  y lágrima
                                                                                    fuego  ardiente de sol que la entrelaza
                                                                                  alcanzada de mieses y de frutos
                                                                                    la  pasión infinita
                                                                                
                                                                                        
                                                                                        ***
                                                                                
                                                                                  Podría olvidar de su figura    
                                                                                    como  si fuera artífice de formas
                                                                                    y  más aún de espíritu     podría
                                                                                  podría amanecerse de dormirse
                                                                                    comprometerse  de evadirse    y
                                                                                    encontrarse  de soñarse     estaba allí
                                                                                  desnudo y quieto      casto y corrupto
                                                                                    bondad  y miséria      crueldade y caricia
                                                                                    expresión  y olvido     empinándose 
                                                                                  a la cúspide del mundo  ardiéndose  en su llama
                                                                                    renegando  en su ser      asumiendo su queja
                                                                                    atizando  su orgullo        olvidando su amor
                                                                                  enfrentado el dilema
                                                                                    podría  ser el hombre      eternamente
                                                                                    ciego  del hombbre         solitário del hombre. 
                                                                                
                                                                                 ***
                                                                                
                                                                                  Estaba allí    parado    de cuerpo erguido   tardo
                                                                                    baja  em albos l aluna y luce a cantos
                                                                                    el  rayos cristalino
                                                                                   cuantas veces he visto desde el sobre  gristarde
                                                                                    la  risa de la noche perfilada a pedazos
                                                                                    galopando  los sueños
                                                                                    jugando  con las sombras caprichosas alinda
                                                                                    estampadas  al viento
                                                                                    sus  depejadas hojas movidas de senderos
                                                                                    abiertas  arboradas
                                                                                    volaban  al antojo de un reflejo
                                                                                    y  luego esmeriladas se perdían
                                                                                  atizaban  chispazos las luces ardorosas
                                                                                    por  las matas del tempo
                                                                                    y  una mano envolvia de bellotas y arrullos
                                                                                    la  hora de mañana.
                                                                                
                                                                                       Estaba allí    parado    de cuerpo erguido   tardo.
                                                                                        
 
                                                                                TEXTOS  EM PORTUGUÊS
                                                                                Tradução de Antonio Miranda
                                                                                 
                                                                                
                                                                                  Este  feroz e vulgar informador
                                                                                    o  ético e formal pensador
                                                                                    o  indômito audaz impertinente
                                                                                    de  todo o universo e da mente
                                                                                  o formador fantástico fazedor
                                                                                    o  pequeno rufião empreendedor
                                                                                    o  importante líder eloquente
                                                                                    o  efêmero juiz tão inclemente
                                                                                  almejante de amor e prisioneiro
                                                                                    entre  a coragem e o pensar extenso
                                                                                    de  minha paixão e de meu entendimento
                                                                                  e  ardente entre a espada e o aço
                                                                                    e  terno entre os olhos e o alento
                                                                                    desse fogo indelével tão intenso.
                                                                                
                                                                                 
                                                                                        ***
                                                                                
                                                                                  Quando eu me desnudo na palavra
                                                                                    e  encurto os umbrais    os abismos
                                                                                    quando  sinto a dor como que estoura
                                                                                    e  ao amor esmigalho em seu martírio
                                                                                  em  seu prazer a fogueira arde de sonhos
                                                                                    e  palpitam os tempos e as almas
                                                                                    palpita  o universo e se ruboriza
                                                                                    a  luz da alvorada
                                                                                  se me desnudo em órbita de luzes
                                                                                    e  regresso fêmea à terra
                                                                                    entrega  e lágrima
                                                                                    fogo  ardente de sol que a entrelaça
                                                                                  alcançada de searas e de frutos
                                                                                    a  paixão infinita.
                                                                                
                                                                                        ***
                                                                                        
                                                                                
                                                                                  Poderia esquecer sua figura
                                                                                    como  se fosse artífice de formas
                                                                                    e  mais ainda de espírito  poderia
                                                                                  poderia amanhecer-se de dormir-se
                                                                                    comprometer-se  de evadir-se       e
                                                                                    encontrar-se  de sonhar-se    estava ali
                                                                                  desnudo e quieto       casto  e corrupto
                                                                                    bondade  e miséria     crueldade e carícia
                                                                                    expressão  e olvido     empinando-se
                                                                                  à cúspide do mundo      ardendo-se em sua chama
                                                                                    renegando  em seu ser   assumindo sua queixa
                                                                                    atiçando  seu orgulho     olvidando seu amor
                                                                                  enfrentando o dilema
                                                                                    poderia  ser o homem      eternamente
                                                                                    cego  do homem              solitário do homem.
                                                                                
                                                                                 
                                                                                ***
                                                                                
                                                                                  Estava ali    parado   de corpo erguido   tardio
                                                                                    desce  em alvos a lua e brilha em cantos
                                                                                    o  raio cristalinos
                                                                                  quantas vezes eu vi desde o envelope  cinzatarde
                                                                                    o  riso da noite perfilada em pedaços
                                                                                    galopando  os sonhos
                                                                                    jogando  com as sombras caprichosas limitas
                                                                                    estampadas  ao vento
                                                                                    suas  despejadas folhas movida em caminhos
                                                                                    abertos  arvoredos
                                                                                    voavam  caprichosamente de um reflexo
                                                                                    e  logo esmerilhadas se perdiam
                                                                                  atiçavam  faíscas as luzes ardentes 
                                                                                    pelas  matas do tempo
                                                                                    e  mão envolvia de glandes e arrulhos
                                                                                    a  hora da manhã.
                                                                                  Estava ali    parado   de corpo erguido   tardio.
                                                                                   
                                                                                   
                                                                                  Página  publicada em junho de 2017